La Aportación de la Mujer en la Economía

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La Panga

Por: Mayahuel Hurtado Ortiz

El trabajo no remunerado que realiza la mujer en el hogar  tiene un aporte fundamental en el bienestar de la población, sus labores producen bienes y servicios que no se compran en el mercado, por cuestiones económicas o por costumbre. Por ejemplo, en los hogares, los alimentos requieren ser cocinados y servidos; la casa y su mobiliario necesitan limpieza y mantenimiento; los niños, los adultos mayores o las personas con alguna limitación física o mental necesitan atención y cuidados.

Así, en 2016 de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), las mujeres tuvieron la mayor carga total de trabajo con 54.2%, lo que implica que por cada 10 horas de trabajo total femenino los hombres realizaron 8.5 horas. La participación de las mujeres en las principales actividades de la economía, como manufactura, servicios y construcción, van tomando relevancia.

En cuanto al valor económico de las labores domésticas y de cuidados no remunerados, las mujeres realizan 76.7% del total, equivalente a 15.6% del PIB nacional en el 2016. De esta manera, el monto económico de cada mujer que realiza estas labores resultó similar al contribuir con 41,100 pesos anuales para cubrir las necesidades de su hogar.

Si se divide la contribución por sexo de acuerdo con la actividad realizada en el trabajo no remunerado en el hogar, en todos los casos la aportación de las mujeres supera el monto de los hombres; por ejemplo, en las actividades de alimentación las mujeres participan con 85.6% del rubro, enseguida está la limpieza y cuidado de la ropa y calzado, con 85%, mientras que la menor contribución de ellas está en las compras y administración del hogar, con 56.8% del total de ese bloque.

En el año 2015, el total de personal ocupado en el sector de la Construcción fue de 720 mil 448, con una participación de 79 mil 664 mujeres, cifra que corresponde al 11.1 %. Cabe señalar que la participación de las mujeres en el sector Construcción ha sido constante al menos en los últimos 25 años.

En el año 2016, las mujeres participaron con el 33.9% del total del personal ocupado en las industrias manufactureras, lo cual significa que una de cada tres plazas de este sector es ocupada por mujeres.

De las 15 ramas económicas que ocupan mayor cantidad de mujeres, las primeras cinco que destacan son la fabricación de partes para vehículos automotores, con un aporte del 17.9% de mujeres ocupadas; la elaboración de productos de panadería y tortillas, con el 10.4%; la confección de prendas de vestir con el 6.9%; y finalmente, la fabricación de productos de plástico y la fabricación de componentes electrónicos con el 5.9% y 5.7%, respectivamente. En conjunto, estas 15 ramas ocupan el 69.5% del total de mujeres que laboran en las industrias manufactureras.

Los servicios privados no financieros se integran por nueve sectores. En 2015 la participación de las mujeres destacó en los servicios educativos, con un 62.9% de participación, seguido por los servicios de salud y asistencia social, con un 61.3% de participación, y en menor medida (49.9%), en los servicios de alojamiento temporal y preparación de alimentos y bebidas.

Finalmente, poco más de 160 mil mujeres estuvieron ocupadas en el comercio al por mayor durante 2011 (26% de la ocupación en este sector), mientras que en el comercio al por menor, la ocupación de las mujeres fue más intensiva, alcanzando el 51% de los 5’110,689 personas ocupadas en ese año.

Como usted puede ver amable lector, la participación de las mujeres en la vida económica del país se refleja en las estadísticas. En el hogar, en áreas como la construcción, las manufacturas, en el comercio informal, la participación de las mujeres es amplia, lo que significa que somos el corazón, la arteria principal de la economía de este país. Y a ello hay que sumarle que cada día que pasa es mucho más notoria la participación del género femenino en las actividades empresariales, es decir, dirigiendo negocios y generando empleos.

Según datos publicados hace unos días por la prensa nacional, en México el 40 por ciento del Producto Interno Bruto es aportado por mujeres. “Hoy en día, la aportación de las mujeres al Producto Interno Bruto (PIB) es de alrededor del 40%, considerando tanto a las empresarias y emprendedoras, como a quienes realizan labores en el hogar, resaltó Angélica Fuentes, CEO de Omnilife y directora del Foro para la Cooperación.

Aunque a algunas voces machistas no les guste reconocerlo, la verdad es que México vive tiempos de cambio y cada día que pasa se percibe que el futuro pasa no sólo por la inteligencia de la mujer, sino también por la visión que tienen como amas de casa, como trabajadoras y desde luego, como empresarias.

Enhorabuena a todas las mujeres. Los datos de la micro y de la macro economía nos dicen que poco a poco vamos ganando terreno en la lucha contra un machismo que nos ha mantenido pisoteadas durante muchas décadas. México, Colima y Manzanillo empiezan a vivir el siglo de la mujer. Al tiempo.