Por: Mario Acevedo Manzano
En el presente año las expectativas económicas no presentan signos halagadores como para asegurar una bonanza económica al final del sexenio de Peña Nieto, más bien, es la incertidumbre la principal variable a considerar para mantener un realismo económico en lo que resta del año, si bien, en los últimos cinco año existe crecimiento económico este, no fue lo suficiente para asegurar un mayor bienestar a las familias y comparado con los países miembros de la OCDE nuestro crecimiento se mantuvo abajo un punto sobre el promedio de crecimiento de los demás países miembros de dicha organización.
Los indicadores más importantes para hacer crecer la economía son: la inversión pública, privada, demanda nacional e internacional, tasa de interés en el uso del financiamiento a la inversión productiva y financiamiento al consumo interno, en cuanto a inversión pública, el gasto total estimado en más de cinco billones de pesos es posible acelere el consumo, mantenga el empleo del personal ocupado por los tres niveles de gobierno y contribuya a la creación de nuevos empleos por la derrama en el territorio nacional del gasto público total, sobre todo, en obras de infraestructura. En la inversión privada, dividida a su vez en nacional e internacional es de esperar una reinversión moderada de parte de las empresas establecidas y la creación de nuevas empresas de capital internacional por la inversión en la producción de petróleo y sus derivados. La demanda nacional es posible se fortalezca al mantener el desempleo por abajo del 5% de la Población Económicamente Activa y los incrementos al salario por el consenso logrado entre el gobierno, organizaciones sociales y empresarios. En la demanda internacional el panorama es incierto por la necedad del Presidente Trump de imponer los intereses norteamericanos sobre los intereses de mexicanos y canadienses, sin embargo, las empresas establecidas en territorio nacional dedicadas a la producción de exportación están confiadas en continuar exportando al mercado de los EUA a pesar del posible cobro de impuestos a los productos importados por los Norteamericanos junto con la apertura de nuevos mercados internacionales a la producción de bines y servicios producidos en México.
En el Estado de Colima es posible mantener el crecimiento económico por arriba del 5% uno de los más altos comparado con el resto de las entidades del país, si bien en 2016 alcanzo una tasa de crecimiento anual de 5.7 es de esperar para el año pasado un crecimiento similar si consideramos la inversión realizada en las actividades agropecuarias en donde muchos productos agrícola colimenses como papaya, plátano y limón ya cuentan con un mercado internacional asegurado por las avanzadas tecnologías empleadas en la producción y comercialización de productos agrícolas colimenses, le doy un dato estimado lector, hasta el mes de agosto del año pasado existían siete empresas nacionales con certificación internacional para exportar y, de las siete, seis son colimenses, por ello la producción agrícola colimenses está llegando a muchos destinos internacionales.
El uso eficiente del gasto público estatal en el gobierno de Nacho Peralta está dando buenos resultados en el sector agropecuario y en el sector turístico, es de esperar una mayor inversión de parte de los inversionistas en ambos sectores, no en balde, los Secretarios de Turismo y Desarrollo Dr. Cesar Castañeda Vázquez del Mercado y el Ing. Agustín Morales tiene la aceptación de los colimenses por el trabajo realizado en la responsabilidad de cada uno.
La inflación, tasa de interés y de cambio del peso frente al dólar, deuda pública interna y externa, equilibrio de las finanzas públicas son indicadores económicos de vital importancia para mantener el crecimiento económico, los gobiernos de los últimos años mantienen controladas esas variables y es de esperar continúen por el mismo camino, a pesar del incremento de 15 puntos porcentuales del PIB equivalente a un aproximado a 1.8 billones de pesos de la deuda pública en el actual gobierno de Peña Nieto y un aumento en la inflación del doble en el presente año por los gasolinazos del año pasado y los aumento al gas para uso doméstico e industrial.
A pesar de la incertidumbre del presente año, debemos recordar que en los últimos treinta años del siglo pasado cada fin de sexenio la economía nacional padecía devaluaciones e inflación con un efecto adverso en el bienestar de todos los mexicanos, de mantener la inflación en el rango de 3 a 4 puntos y controlada la deuda externo será posible un cambio sexenal ordenado que le dé certeza a la estabilidad política y económica.
Notas cortas
Los resultados electorales para el presente año son estimados en un tercio para cada uno de los Candidatos de las tres coaliciones y un 10% para candidatos independientes, de continuar estas estimaciones, los independientes pueden ser el fiel de la balanza.