Juan Carlos Flores|COLIMANOTICIAS
Colima, Col.- La organización Cómo Vamos Colima dio a conocer los resultados semestrales de la evaluación de los 10 compromisos de gobierno firmados con 5 alcaldes del estado en donde dos de ellos obtuvieron una calificación de “panzazo” mientras el resto, fueron reprobados.
El presidente municipal de Colima, Héctor Insúa García, tuvo un avance general, en los 10 compromisos, del 63% en donde 5 de ellos los cumplió en su totalidad: ofrecer las facilidades al observatorio ciudadano de seguridad, no incrementar la deuda municipal, destinar 2.5% a la promoción de la salud, reducir los índices de pobreza y mejorar la calidad de los servicios públicos.
En contraste, el alcalde capitalino falló completamente en reducir el gasto corriente del municipio y el del despacho del presidente; abatir los delitos del fuero común tuvo un avance del 21% mientras que incrementar los ingresos municipales y generar empleos apenas superó el 50% del cumplimiento.
La administración villalvarense, a cargo de Yulenny Cortés, tuvo un avance general del 31.4% de los 10 compromisos evaluados por la asociación donde destacó en sólo uno: no aumentar la deuda municipal.
En otros tres no hubo información: reducir el gasto del despacho del presidente, reducir los índices de pobreza y mejorar la calidad de los servicios.
En el resto de los cuatro compromisos, la administración villalvarense tuvo un desempeño mediocre.
El presidente municipal de Tecomán, Guadalupe García Negrete, tuvo una evaluación general del 23.6% de los 10 compromisos en donde sólo cumplió con uno en su totalidad: generar empleos.
En el resto de ellos, no superó el 42% de avance destacando tres compromisos con 0% de cumplimiento: reducir el gasto del despacho del presidente, no incrementar la deuda municipal y reducir el gasto corriente.
La alcaldesa de Manzanillo, Gabriela Benavides, tuvo un avance general del 48.9% en donde cumplió al 100% tres compromisos: no incrementar la deuda municipal, destinar 2.5% de recursos a la promoción de la salud y reducir los índices de pobreza.
En donde salió reprobada fue en mejorar la calidad de los servicios, incrementar los ingresos municipales, generar empleos, abatir los delitos del fuero común, reducir el gasto corriente y reducir los gastos del despacho del presidente.
En Comala, Salomón Salazar tuvo un avance general del 52.8% mientras que Minatitlán, con Horacio Mancilla, fue del 63%.