Control de diabetes e hipertensión, fundamental para prevenir daños al riñón

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Redacción|COLIMANOTICIAS

Colima, Col.- En el marco del Día Mundial del Riñón, la Secretaría de Salud y Bienestar Social del Gobierno del Estado dijo que para prevenir el desarrollo de patologías renales como la enfermedad renal crónica es fundamental el control de la diabetes mellitus y la hipertensión arterial por parte de las personas afectadas por estos padecimientos.

Reiteró que las principales causas de los daños a los riñones de las personas que son atendidas en el Centro Estatal de Hemodiálisis son las citadas enfermedades crónicas, seguidas de los padecimientos que se caracterizan por una pérdida de las funciones de cada uno de los diminutos ovillos de capilares situados en el riñón (glomerulopatías) en jóvenes.

Asimismo, mencionó que otros factores de riesgo más frecuentes en la aparición de la enfermedad renal crónica (ERC) son las alteraciones vasculares, las glomerulopatías y enfermedades hereditarias que afecten al riñón como el Síndrome de Alport, así como daño renal agudo persistente y uso de medicamentos antiinflamatorios (para dolor) por periodos prolongados.

La dependencia señaló que las personas con hipertensión arterial, diabetes o cualquier enfermedad sistémica que pueda perjudicar los riñones deben seguir controles médicos periódicos y evaluar regularmente su función renal, acudiendo a consulta médica para someterse a una revisión clínica y hacerse exámenes para la detección temprana de alguna patología renal y un tratamiento oportuno.

Precisó que la ERC es un padecimiento silencioso y es desconocido por lo general por las personas, y que los síntomas de la insuficiencia renal aparecen o se detectan cuando esta enfermedad está avanzada en un 80 ó 90 por ciento, siendo la diabetes –principal causa del fallo renal crónico y que más se asocia a la enfermedad renal terminal-, la hipertensión arterial y la anemia los padecimientos que pueden desarrollar la ERC.

En este sentido, comentó que otros síntomas de la ERC o insuficiencia renal avanzada son dolor de cabeza, comezón, vómitos, hinchazones en extremidades, dificultad para respirar, dolor agudo en los pies, somnolencia, confusión y, en ocasiones, convulsiones, así como coloración amarillenta de la piel, ausencia de menstruación e impotencia.

Para evitar el riesgo de padecer insuficiencia renal, que reduce a cinco años la sobrevida con tratamiento, dijo que es necesario prevenir la obesidad, diabetes mellitus, hipertensión arterial, dislipidemia y eludir el abuso de medicamentos que pueden dañar el riñón, como los analgésicos antiinflamatorios.

De la misma manera, se requiere tener hábitos saludables como una alimentación balanceada, ingesta de agua simple entre 1,5 y 2 litros, reducir el consumo de alcohol, dejar de fumar y hacer ejercicio. Aunado a lo anterior, las personas que viven con diabetes vigilen sus niveles de azúcar (glucosa) en sangre y su presión arterial.

Además, los cuidados sugeridos a la población para evitar daños en el riñón son ingerir alimentos con bajo contenido de sodio (sal), optar por una dieta rica en frutas y verduras y realizar activación física, ya que las enfermedades crónicas no transmisibles aumentan el riesgo de desarrollar la insuficiencia renal, en la que ambos riñones pierden la capacidad de filtrar las sustancias tóxicas de la sangre.