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México.- Su trabajo es proteger los músculos del esfínter anal (los que abren y cierran el ano) y ayudar a mantener el ano cerrado en momentos de presión abdominal, como cuando estás tosiendo. Sin embargo, se convierten en un gran y doloroso problema cuando se inflaman. Una vez que esto sucede, se conocen como “pilas.”
La mala información nos ha llevado a pensar que las hemorroides y las pilas son lo mismo, pero no. Y esto es especialmente malo porque a los 50 años, la mitad de la población tendrá que sufrir de esto, según Gizmodo. Y, por si fuera poco, según CRH Medical, sólo 1 de 3 personas buscan tratamiento para este problema.
No comes suficiente fibra
Tu dieta juega un rol importante en el estado de tus hemorroides. Si a tu dieta le falta fibra, lo más seguro es que sufras de estreñimiento de manera regular. Y cuando estás estreñida, te esforzarás mucho en el excusado para sacar las heces de tu cuerpo. Gracias a esto, la presión en las venas del recto y canal anal pueden contribuir a la inflamación de las hemorroides.
Sobrepasarte en el gym
Levantar pesas pesadas y cualquier otro objeto pesado contribuye a la inflamación de hemorroides por el esfuerzo, según Mayo Clinic. En lugar de presionarte hasta sentir que vas a explotar, mejore relájate y no te esfuerces mucho, o podrías lidiar con algunos problemas incómodos más adelante.
Te quedas mucho tiempo sentada en el excusado
Si tienes el mal hábito de llevarte el celular al baño… piénsalo de nuevo, pues pasar más de 5 minutos en el excusado puede ser muy malo para tu salud.
Lo que sucede es que los músculos pélvicos se relajan naturalmente en preparación para la defecación. Tus músculos están condicionados para aflojarse cuando te sientas en el inodoro, según WebMD. Cuando esto sucede, la sangre fluye libremente hacia las hemorroides. Más sangre significa hemorroides más inflamadas, lo que significa más problemas.
Estar sentada mucho tiempo
A todas nos gusta ver la tele por mucho tiempo, pero estar sentada por momentos prolongados puede provocar un problema de hemorroides. Esto sucede porque la posición pone presión en las venas, y entre más presión haya, mayor es el riesgo.
No tomar mucha agua
Otra razón para tomar tus 2 litros de agua al día: no tomar suficiente H2O provoca la inflamación de hemorroides, pues la deshidratación causa estreñimiento, según Medical News Today. La falta de agua endurece las heces, complicando así su evacuación.
Andar en bici
Si eres de las que adora las clases de spinning, debes saber que aumentan tu riesgo de hemorroides. Poner el asiento duro en tu perineo, y luego inclinarte hacia adelante, no sólo incrementa el flujo de sangre a las hemorroides, sino que también aplica mucho presión. Cada vez que te pones en cuclillas por horas y horas, corres el riesgo de agravar las hemorroides.
Fuente: Eme de Mujer