Análisis Político
Por: Abel González Sánchez
El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública de la Secretaría de Gobernación, determinó una nueva metodología para el registro y clasificación de los delitos y las víctimas para fines estadísticos a nivel nacional, que dio inicio en enero del 2018 para tener una información más precisa sobre la incidencia delictiva, actualizándola constantemente para darla a conocer a las entidades más periódicamente.
Para el caso de Colima reconoce que va bien actualmente, porque determinó que los delitos en el presente año van a la baja en comparación a 2017, los robos en general presentan una disminución de 13.85 por ciento, al pasar de dos mil 288 en el acumulado de enero a abril de 2017 a mil 971 en el mismo periodo de 2018. La principal disminución en el delito de robos se presenta en robo a transeúntes, los cuales han bajado un 47.6 por ciento, después sigue robo a comercio con un descenso del 41.16 por ciento; en cuanto a robo de vehículo, la disminución es de 14 por ciento; el robo a casa habitación apenas ha bajado un 5.7 por ciento, mientras que el robo diverso 3.9 por ciento, por tal motivo la sociedad colimense debería enterarse que los índices delictivos en Colima están a la baja en comparación con el 2017, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Y es que, desde el 2016, en la entidad se creó el Grupo de Coordinación Interinstitucional en Seguridad que encabeza el gobernador Ignacio Peralta Sánchez, con el objetivo de disminuir la incidencia delictiva en la entidad, participando la Secretaría de Marina, Secretaría de la Defensa Nacional, PGR, Cisen, Policía Federal, Procuraduría General de Justicia del Estado, Secretaría de Seguridad Pública, entre otras instancias federales y estatales.
Los resultados han sido gradualmente satisfactorios, excepto en el tema de homicidios dolosos o de impacto ya que estadísticamente también se incrementaron en la mayoría de los estados de la República. Pero la mayor disminución de delitos se presenta en las violaciones, pues mientras en el primer cuatrimestre de 2017 sucedieron 45, en el mismo periodo de este año el registro es de apenas 24, es decir, la disminución alcanza un 46.66 por ciento. La extorsión, por otra parte, también presenta resultados a la baja, pues Colima pasó de 13 extorsiones que se concretaron en el primer tercio del año 2017 a diez extorsiones en los cuatro primeros meses de 2018.
Los homicidios prácticamente se mantienen, pues la variación a la alza es sólo del 1.12 por ciento, pues de enero a abril de 2017 se suscitaron 221 y en el mismo periodo en 2018 han ocurrido 249. Sin embargo, la tendencia mensual de homicidios es a la baja, pues de iniciar el año 2018 con 70 homicidios en enero, para febrero y marzo se tuvieron más de 60 por mes y en abril bajaron a 54. Finalmente, el delito de secuestro se mantiene en cero en los primeros cuatro meses del año, del mismo modo que sucedió en el 2017.
Una de las principales demandas de los colimenses es la seguridad, situación que hace unos años no podía garantizarse por parte del Estado; sin embargo, la estrategia, la coordinación cada vez más estrecha por la conformación del Grupo de Coordinación Interinstitucional en Seguridad que creo el ejecutivo estatal ante la demanda ciudadana, ha logrado una disminución muy importante en los índices delictivos como podemos apreciar y tendrán que seguir bajando y más aún si ahora con las nuevas administraciones municipales al cambio de gobierno, deciden aportar más recursos y apoyos al problema de la seguridad pública en sus colonias, porque algunos de oposición política al gobierno estatal están prácticamente cruzados de brazos, acusando a las autoridades superiores.