Juan Carlos Flores|COLIMANOTICIAS
Colima, Col.- Desde el 1 de agosto, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) opera como partido político y en Colima anunció una marcha contra la reforma energética promovida por comuneros de Zacualpan.
En rueda de prensa, Vladimir Parra Barragán, señaló que están en las calles trabajando en difundir casa por casa las causas y argumentos que promueven y “que en menos de dos meses estamos a punto de lograr nuestra meta de firmas para promover la consulta y revertir la reforma energética” en donde ya llevan 8 mil signaturas.
Señaló que a iniciativa del Comité Indígena por la Defensa del Territorio de Zacualpan han decidido movilizarse “nos sumaremos a la convocatoria del pueblo de Zacualpan, una movilización promovida de forma autónoma por los principales afectados del atraco a nuestras tierras y recursos este miércoles 6 de agosto a las 5:00 pm en el jardín Núñez”, dijo.
“Seguramente no seremos miles de personas como cuando el gobierno del Estado movilizó a trabajadores y priistas para respaldar el robo de Peña Nieto, pero nuestra fuerza está en la honestidad y la voluntad legítima”.
Reclamó a Ignacio Peralta, Mely Romero, Itzel Ríos, Arnoldo Ochoa, Miguel Ángel Aguayo, Jorge Luis Preciado como los partícipes de la restauración “del autoritarismo y la centralización, del despojo de los pocos derechos que los ciudadanos tenemos a cambio de nuestro trabajo y nuestras responsabilidades con el Estado”.
“Han aprobado la reforma energética, laboral y educativa de acuerdo a los deseos de quienes gobiernan tras Peña Nieto, y no han tenido el oficio y la sensibilidad de aceptar el debate real y con posibilidades de influencia ¿Y todavía tienen el cinismo de competir por ocupar un cargo público en las próximas elecciones? ¿Para qué quieren gobernar Colima si promueven la descomposición y son aliados de la corrupción?”.
Manifestó que hay oídos sordos a las demandas y el esfuerzo de la sociedad “a los colimenses nos alarma una situación que parece no alcanzamos a comprender, la violencia y el ensañamiento contra las mujeres, pero lo más grave es la falta de reconocimiento de este problema, pues el gobierno estatal y sus aliados incondicionales se esfuerzan en tapar con discursos y justificaciones una realidad que se les escapa de las manos”.