Cambios fisiológicos requieren una mejor hidratación

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Redacción|COLIMANOTICIAS

Colima, Col.- A fin de mantener una adecuada hidratación en los adultos mayores es recomendable disponer de 7 a 8 vasos de agua al día para garantizar el buen funcionamiento de los órganos y así evitar su deshidratación, el cual es el trastorno hidroelectrolítico más frecuente en la población de adultos mayores.

El efecto del envejecimiento se asocia con diversos cambios fisiológicos que pueden afectar la capacidad para tener el balance de agua en el organismo, toda vez que con la edad disminuye el agua corporal asociada a la pérdida de masa corporal y manifestándose en la disminución de la sensación de sed y la capacidad de los riñones de concentrar la orina.

El Departamento de Atención a la Salud del Adulto y del Anciano señaló que a los adultos mayores les resulta difícil beber dos litros de agua al día por temor a la incontinencia, para evitar urgencias de ir al baño cuando se encuentran fuera de casa; pero además con la edad se producen cambios en la función renal y disminución en la sensación de sed.

Sin embargo aseguró que la deshidratación en el adulto mayor se asocia con la presión arterial baja, aumento de temperatura corporal, confusión mental, dolor de cabeza, irritabilidad y estreñimiento, por lo que es necesario facilitar el consumo de agua simple a estas personas.

Otros síntomas de la deshidratación son agitación, constipación, orina escasa, concentrada, oscura y con olor fuerte, mareos, debilidad o vértigo, dolor de cabeza, pérdida de apetito, rubor en la piel, intolerancia al calor y ardor de estómago. El adulto mayor puede presentar deshidratación severa cuando presenta dificultad para deglutir, torpeza, piel arrugada, ojos hundidos y visión débil, micción dolorosa, piel entumecida, espasmos musculares y delirio; en ese caso se requiere atención médica.

El área dependiente de la Secretaría de Salud y Bienestar Social de Gobierno del Estado recomendó que las personas mayores deben ingerir de 1.5 litros a 2 litros de agua al día los cuales deben incrementarse cuando aumenta la temperatura ambiental o se tiene fiebre; en tal caso se recomiendan 500 mililitros más por cada grado de fiebre que rebase los 38 grados centígrados.

Dijo que para ayudar a que el adulto mayor mantenga un estado óptimo de hidratación que le ayude a su bienestar, su ingesta de agua debe realizarse de forma gradual por lo que para alcanzar la meta de 8 vasos al día, se recomienda que las personas beban un vaso en cada una de las comidas para favorecer la ingestión de sólidos y otros cuatro vasos distribuidos en el resto de la jornada.