Atrapan a una Banda de Secuestradores

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    El grupo especializado en esclarecimiento de secuestros de la Policía de la PGJE, el pasado martes 4 de los corrientes, dieron un fuerte golpe a la delincuencia organizada al desmantelar y detener en Armería, a cuatro personas del sexo masculino que forman parte de una banda de secuestradores.

    Ellos son Miguel Ángel Ruiz Mendoza, (a) “El Güero”, (autor intelectual y material), Antonio Sánchez Acevedo, (a) “El Remolino”, Teodoro Enrique Acevedo Ávalos, (a) “La Quica”, (empleado de la víctima), así como un menor de 16 años, que por obvias razones se omite su nombre, (ex empleado de la víctima).

    Asimismo se encuentra plenamente identificado un quinto miembro de la banda quien se encuentra prófugo y es autor intelectual de los hechos, y conforme a lo manifestado por su cómplices se llevó el dinero del rescate, 302 mil 500 pesos, y que por obvias razones se omite su nombre.

    En su denuncia el ofendido que por obvias razones se omite su nombre, dijo al representante social que cuenta con la edad de 41 años, de ocupación agricultor y vecino de la ciudad de Tecomán., manifestó que junto con sus hermanos son propietarios de algunos predios en Cofradía de Juárez y Coalatilla, en el municipio de Armería, mismo que utilizan para la siembra de chile y papaya, los cuales a diario realiza recorridos y supervisión de la siete de la mañana a las siete de la noche.

    Sábado 1 de Noviembre

    Explicó que el pasado 1 de noviembre salió de su casa como de costumbre a las 07:15 hrs, a bordo de su camioneta Toyota, tipo Tacoma, tomando la autopista Colima-Manzanillo, para dirigirse a los predios en Coalatilla.

    Dijo que luego de hacer un recorrido por alguno de los predios para ver como estaba el riego, y luego de hacer unas llamadas por su celular para dar instrucciones a los encargados decidió regresar a su oficina ubicadas en Tecomán, para firmar algunos cheques.

    Manifestó que llevaba algunos kilómetros recorridos por uno de los caminos saca cosechas, cuando de manera sorpresiva de entre la maleza salieron cinco personas del sexo masculino, con el rostro cubierto con pañuelos y manta, además traían gorras y portaban armas cortas y largas, por lo que detuvo la unidad de manera intempestiva.

    Señaló que luego le ordenaron que se pasara a los asientos de atrás y al ver que su vida corría peligro lo hizo, y uno de ellos conducía mientras los demás lo iban custodiando con pistola en mano, además de cubrirle los ojos con un pañuelo.

    Dijo que luego de caminar por algunos minutos y como conoce muy bien la zona, intuyó que habían llegado a Coalatilla, luego de varias vueltas detuvieron la marcha de la camioneta y lo bajaron en el río, para de ahí llevarlo a una loma no sin antes quitarle el pañuelo de los ojos.

    Una vez que llegaron a la cima siguieron caminando por una tamarindera y luego comenzaron a subir un cerro, no sin antes taparle los ojos y atarle las manos por la espalada con una soga de plástico.

    Agregó que habían subido algunos metros cuando le dijeron que tenía ocho segundos para hacer una llamada por su celular a quien quisiera e informarles que estaba secuestrado y que se requerían 2 millones de pesos, por su rescate, y los secuestradores en su momento se comunicarían para iniciar las negociaciones.

    Manifestó el ofendido que los secuestradores le advirtieron que les comentara a su familia que “NADA DE POLICIA”, y luego de todo ello le quitaron el celular y siguieron caminando, hasta que llegaron a la sima, quedándose dos de los indiciados a cuidarlo, mientras que el resto habían bajado del cerro.

    Dijo que por la tarde regresaron los tres secuestradores, llevando consigo latas de atún y refrescos, luego el jefe de al banda le dijo “como vez para tu hermano vales 100 mil pesos”, por lo que le pidió que le prestara el teléfono para pedirle que consiguiera el dinero lo más pronto posible.

    De igual forma manifestó que quienes lo cuidaban se turnaban y le preguntaban que si estaba bien, señaló que ese mismo día del secuestro (1 de noviembre del 2008), por la noche le quitaron el pañuelo de los ojos y le dijeron que se recostara y que no los volteara ver, pero en un descuido de ellos, logró identificar a uno de ellos, siendo un menor que meses atrás había trabajado para él y que horas antes del secuestro se lo había encontrado en uno de los predios montando un caballo pero no le dio importancia su presencia.

    DOMINGO 2

    En las primeras horas del domingo se fueron a una parte más alta del cerro porque no tenía señal el celular, y minutos después le informaron que no se había llevado a cabo el pago del rescate, por lo que les insistió que le permitieran hablarle a su hermano como ocurrió y le preguntó por el pago, informándole que ya tenían el dinero, que le indicaran el lugar de la entrega, comentario que escucharon los plagiarios, manifestándole que más tarde se comunicarían para establecer la hora y el lugar.

    Señaló que uno de los secuestradores bajó del cerro mientras los demás lo custodiaban y “El Güero”, quien traía unos binoculares le preguntó que si su hermano traía una camioneta blanca, a lo que le contesto que sí, luego le cuestionó sobre la presencia de algunas patrullas a lo que le contestó que seguro era por las fiestas que hay en Cualatilla.

    Sin precisar la hora manifestó la víctima que sería la tarde del domingo cuando le informaron que ya se había pagado el rescate, por lo que le dieron un billete de cien pesos, lo desamarraron y le dijeron que en 40 minutos sonaría la alarma del reloj y al término de la misma comenzara a bajar, por lo que a las 17:50 hrs., comenzó a decender del cerro.

    Manifestó que sus secuestradores antes de liberarlo le advirtieron que no presentara denuncia, de lo contrario regresarían para cobrársela o le harían daño a los demás miembros de su familia.

    Finalmente expresó que una vez que llegó a Cualatilla, se dirigió a una de las bodegas que tienen en dicha población, encontrando a su hermano con quien dialogó algunos minutos y le informó que habían lagado 302 mil 500 pesos por su rescate, luego se trasladaron a su casa en Tecomán.

    Miguel Ángel Ruiz Mendoza, (a) “El Güero”, manifestó que cuenta con 27 años de edad, casado, ocupación, limonero; originario de Baiselia, California, vecino de la población Augusto Gómez Villanueva, (Coalatilla), en Armería, cuenta con la doble nacionalidad.

    Asimismo manifestó que tiene poco tiempo de haber llegado de Estados Unidos, ya que no tenía un trabajo fijo y había dos órdenes de arresto en su contra, una por conducir en estado de ebriedad y otra por posesión de droga.

    Dijo “El Güero” que como no tiene un empleo bien remunerado aceptó la propuesta que le hizo su amigo quien se encuentra prófugo, de realizar un secuestro como lo había hecho en días pasados en Tamaulipas, habiendo obtenido entre 50 y 100 mil pesos, por cada uno que realizó en complicidad con otras personas.

    Añadió que ante atractiva propuesta aceptó, acordando que el secuestro que cometieran pedirían inicialmente 2 millones de pesos por el rescate y de ahí comenzarían las negociaciones, además que requerían de la ayuda de otras tres personas, a quienes les tocaría únicamente 20 mil pesos, mientras que ellos dos les tocaría la mayor parte.

    Dijo que luego se dirigieron a la casa de su cómplice, quien le entregó una pistola 9 mm, así como un celular, y le dijo que buscara a los demás participantes, por lo que así lo hizo.

    30 de Octubre

    “El Güero”, explicó que el 30 de octubre se encontró en el jardín de Coalatilla, a sus amigos “El Remolino” y “La Quica”, a quienes invitó a participar en el secuestro de un agricultor de Tecomán, que era conocido de ellos, incluso el segundo de sus cómplices actualmente trabaja con él, expresándoles que les tocaría 20 mil pesos a cada uno, una vez que pagaran el rescate de 2 millones de pesos, que pedirían.

    Acordaron en dicha reunión que irían vestidos de color negro, con pasamontañas o pañuelo el que no tuviera para no ser reconocidos, por lo que los dos aceptaron y luego invitaron a otras persona del sexo masculino, siendo un menor de 16 años de edad, que por obvias razones se omite su nombre, extrabajador del secuestrado.

    Explicó que luego se fueron a bordo de su camioneta gris a realizar un recorrido, ya que tenía información del recorrido que hace a diario su víctima, así como la hora de salida de su casa, por lo que acordaron que el secuestro lo realizarían al 1 de noviembre a las ocho de la mañana, en el camino saca cosechas, aprovechando donde esta un vado, luego lo llevarían al cerro para iniciar las negociaciones.

    1° de Noviembre

    Antes de las ocho de la mañana “El Güero” a bordo de su camioneta llegó por sus tres cómplices quienes lo esperaban en el jardín de Coalatilla, y les informó que llevaba consigo dos armas, una 9 mm y un rifle 22 automático, por lo que se dirigieron al predio para esperar a su víctima, por lo que escondieron su camioneta entre la maleza y luego se colocaron a los lados.

    Al llegar su víctima al vado, de manera sorpresiva salieron los cuatro marcándole el alto con pistola en mano “El Güero” y “El Remolino”, de inmediato lo obligaron a que se pasara al asiento trasero, lo agacharon y le taparon los ojos con un pañuelo, dirigiéndose a toda velocidad a Coalatilla, para seguir por un costado de la plaza de toros y tomar una brecha que los llevara a un arroyo seco y de ahí al cerro.

    Luego bajaron a la víctima y escondieron la camioneta, para seguir a pie por una tamarindera no sin antes atarle las manos con una soga de ixtle, una vez que llegar al cerro comenzaron a escalar, y luego de realizar un descanso le informaron al ofendido que se trataba de un secuestro y que se necesitaba que les informara de ello a su familia y se requerían 2 millones de pesos, por su rescate.

    De inmediato lo comunicaron con uno de sus hermanos, advirtiéndole que tenía 8 segundos para informarles y que no quería a la policía porque le pesaría, y así se los hizo saber.

    Señaló que a las cinco de la tarde del sábado, “El Remolino”, llamó a la familia del secuestrado y le informaron que sólo tenían 100 mil pesos, por lo que les dijeron que consiguieran el faltante de lo contrario se atuvieran a las consecuencias y colgaron

    Una hora más tarde le prestaron el teléfono al secuestrado para que le llamara a su familia y les dijera que consiguieran el dinero.

    Mientras las negociaciones se realizaban “El Remolino” y “La Quica”, bajaron a Coalatilla, para saber si había alguna información sobre el secuestro, así como para llevar comida y más tarde “El Remolino”, de nueva cuenta bajo y fue por la camioneta de “El Güero” y la llevó a la casa de sus papás.

    A las diez de la noche bajo “El Güero” y fue por la camioneta del secuestrado y se la entregó a su cómplice prófugo, a quien le pidió que se la llevara del pueblo, retornando al cerro a las dos de la mañana del domingo 2 de noviembre.

    2 de Noviembre

    En las primeras horas del domingo “La Quica”, subió al cerro con comida para todos y a las dos de la tarde su cómplice prófugo, le marcó a su celular y le dijo que ya había acordado el pago, que serían 302 mil 500 pesos, dinero que recogería éste último en complicidad de “El Remolino”.

    Dijo que serían las cinco de la tarde cuando de nuevo se comunicó con él y le informó que ya tenía el dinero, que en 40 minutos soltaran al plagiado, por lo que lo desamarraron y le entregaron cien pesos, para que tomara un taxi para que lo trasladara a Tecomán.

    Asimismo manifestó que acordaron que se verían en el rancho propiedad de un familiar de “El Remolino”, para hacer el reparto del dinero.

    Una vez ahí, “El Remolino”, abrió la bolsa donde venía el dinero que pagaron por el rescate, dándole un fajo al menor y otro a “La Quica”, quienes se retiraron en el momento, pero a los pocos minutos llegó el prófugo a quien le informaron de la entrega del dinero, situación que le molestó y regresaron a sus cómplices y les quitaron el dinero.

    “Manifestó “El Güero” que acordaron que el prófugo guardaría el dinero y lo repartiría una vez que se calmaran las cosas, por que de lo contrario despertarían sospechas por traer demasiado dinero, por lo que cada quien se fue a su casa.

    Una vez que el ministerio público agotó la integración de la averiguación previa, puso a disposición del Juez Mixto de Armería, a los probables responsables por secuestro y robo calificado, en agravio del agricultor.

    De igual forma el menor fue puesto a disposición del Juez Especializado en la materia.

    Cabe señalar que los agentes recuperaron la camioneta propiedad de “El Güero”, de la marca GMC, con placas de circulación de Arizona, así como el reloj que uno de los secuestradores le entregó a su víctima, para que una vez que escuchar la allarma pusiera bajar del cerro.