En atención a las querellas presentadas por el representante legal de la marca afectada, durante la diligencia ministerial, encabezada por el Representante Social de la Federación adscrito a la Unidad Especializada en Investigación de Delitos contra los Derechos de Autor y la Propiedad Industrial (UEIDDAPI), se aseguraron las pilas, mismas que quedaron bajo custodia de la Administración Aduanera correspondiente.
Por este hecho, el Agente del Ministerio Público de la Federación inició la averiguación previa 268/UEIDDAPI/2008, para perseguir el delito de Introducción de Productos con Marcas Falsificadas, establecido en el artículo 223 de la Ley de la Propiedad Industrial, que señala penas que van de tres a 10 años de prisión y multa de dos mil a 20 mil días.