La Panga
Por: Mayahuel Hurtado Ortiz
Mucho se ha hablado del fuero en México, incluso ha sido el tema predilecto en tiempos electorales, hay quienes hablan de él con pleno conocimiento y conocen sus alcances, pero hay quienes lo nombran y mencionan, pero aún no les queda claro qué es el fuero. Aquí daremos un recorrido para uno de los temas polémicos en nuestro país, a propósito de la aprobación de su eliminación en San Lázaro.
Por lo que refiere al diccionario de la Real Academia Española, enuncia que la palabra fuero tiene un significado de “jurisdicción o poder”; sin embargo, en términos parlamentarios, se considera como “competencia jurisdiccional especial que corresponde a ciertas personas por razón de su cargo”.
En el derecho procesal mexicano se utiliza la voz “fuero” como sinónimo de competencia, cuando se habla del fuero común, fuero federal y fuero del domicilio, como sinónimo de jurisdicción, que sería el caso del fuero de guerra; también se habla de fuero constitucional, con otro significado ya que trata de un requisito de “procedibilidad”.
El fuero del que hablamos en el tema de hoy, es aquel que evita que servidores públicos de alto rango puedan ser procesados judicialmente por la comisión de un delito durante el periodo de su encargo, como una garantía para la gobernabilidad del país.
De acuerdo con el artículo 111 constitucional, los funcionarios protegidos por esta figura sólo pueden ser llevados ante la justicia civil mediante un proceso de “desafuero”, mientras que al presidente de la República solamente el Senado puede destituirle de su cargo y bajo circunstancias específicas como “Traición a la Patria”.
¿Quiénes son los que tienen fuero en México? Presidente de la República, diputados y senadores, ministros de la Suprema Corte de Justicia, magistrados de la Sala Superior del Tribunal Electoral, consejeros de la Judicatura Federal, el fiscal general de la República, el consejero presidente y los consejeros electorales del Consejo General del Instituto Nacional Electoral; estos cargos amable lector, lectora, son considerados de alta importancia para garantizar la gobernabilidad en el país.
Pero entrando en el tema relacionado con lo acontecido en San Lázaro que acaparó los titulares informativos, tenemos lo siguiente:
“El Pleno de la Cámara de Diputados avaló eliminar el fuero a los funcionarios, incluso al presidente de la República. Con 370 votos a favor, las reformas a los artículos 7, 61, 74, 108, 110, 111, 112 y 114 de la Constitución, establece que el jefe del Ejecutivo podrá ser acusado de traición y delitos del orden común.
“Cabe señalar que los funcionarios no serán sancionados con penas privativas de libertad por deudas de carácter civil, ni tampoco por las conductas que atenten contra el honor de las personas como difamación, calumnia e injuria.
“Además, se les puede imputar penalmente durante el tiempo del cargo que ocupen a gobernadores, diputados locales, Magistrados de los Tribunales de Justicia de las entidades federativas, Consejos de las Judicaturas, presidentes municipales, alcaldes y concejales.
“Para la aplicación de las sanciones, la Cámara de Diputados procederá a la acusación ante el Senado previa declaración de la mayoría absoluta, ‘y en el caso del Presidente de la República, se requerirá de mayoría calificada’.
“El dictamen que integra las 32 iniciativas presentadas en la materia desde 2015, fue respaldada por todos los grupos parlamentarios de San Lázaro.
“Para proceder contra el Presidente y otros funcionarios bastará con la denuncia presentada y ratificada por la autoridad correspondiente”.
Hasta aquí el texto, amable lector, lectora, de uno de los temas que durante años se ha propuesto sobre la mesa de votaciones, hoy los partidos reactivos al PRI celebran esta medida, recordemos pues “que donde quiera se cuecen habas” y en las casas azules, amarillas, morenas, moradas, verdes, turquesas, etcétera, se han dado casos lamentables de actos de corrupción, abusos de autoridad, desvío de recursos, acusaciones que cuestionan su desempeño, y aquellas relacionadas con los placeres mundanos y los vínculos con la delincuencia organizada en diferentes puntos del país; así que nadie tire la primera piedra, nadie está libre de culpa; porque muchos partidos por una persona han resultado expuestos ante la opinión pública.
Esta decisión deberá ser una oportunidad para nosotros los ciudadanos, debido a que si el Senado aprueba la eliminación del fuero, nos permite llevar a rendir cuentas a cualquier funcionario o servidor público de alto nivel, bien sea integrante del Legislativo, Ejecutivo o Judicial a que rinda cuentas ante las instancias de justicia tras una denuncia ciudadana, denuncia que será aceptada y ratificada con la autoridad correspondiente. En Colima ya se dio el primer paso y la Comisión de Puntos Constitucionales ya aprobó también la eliminación del fuero en el ámbito local.
¿A cuántos integrantes de la clase política de diferentes partidos veremos en estos aprietos? Al tiempo.