ESPERAR SENTADOS
Por: Édgar Rodríguez H.
Ante el imbatible Aedes aegypti, mosquito culícido portador del virus del dengue, de la fiebre amarilla y de otras enfermedades, que tiene a Colima como el estado con la más alta incidencia de esos males en el país, según datos oficiales el Sistema Especial de Vigilancia Epidemiológica del Dengue de la Secretaría de Salud del Gobierno, el irresponsable del ramo en el estado, Agustín Lara Esqueda, sólo atina a rendir partes a modo de los caídos por el dengue hemorrágico y a recomendarle a la gente esperar sentada el conteo de las plaquetas.
“La presencia del serotipo 4 está concurriendo con una baja súbita de plaquetas de aquellos que no están guardando reposo y por ende (ocurre) la parte hemorrágica; la recomendación principalmente es la observación de la gente, la gente puede estar sentada, nada más en observación de cómo se comportan las plaquetas en un periodo de cuatro horas y lo que recomendamos es que esté sentado”, reconoce y prescribe el médico que nada positivo ha logrado en materia de salud pública cuando se suponía que ésta era su fuerte y la razón por la que se le repatrió a Colima a cubrir el cargo que había quedado vacante por la muerte de su antecesor.
El funcionario que le ha fallado a los colimenses y a quien en él depositó su confianza al contratarlo, habla de intensificación de acciones principalmente en Colima y Villa de Álvarez, ¿y en Manzanillo? , sin especificar en qué consisten ni los resultados de las mismas. El galeno también dice que la estrategia que han implementado – ¿cuál? – es que el serotipo 4 no se quede en Colima porque el virus infesta a los moscos a la siguiente generación. El problema es que este vicho ya se aquerenció en tierras colimotas donde vuela a sus anchas a ciencia y paciencia del señor de “Las Larvas”.
Si Lara Esqueda continúa en sus cómodas oficinas en la misma postura que les recomienda a las víctimas del mosquito culídice, sentado, los colimenses seguirán en la indefensión y como mudos testigos de que los programas de fumigación y descacharrización son mucho humo y ruido pero de bajo impacto positivo en el abatimiento del dengue. Por supuesto que el inexplicablemente todavía Secretario de Salud nunca va a reconocer el haber llegado a su novel de incompetencia, según el principio de Peter. Por eso es impensable que renuncie al cargo para que llegue alguien que sí pueda con el paquete.
Probado está que los cambios de funcionarios de primer nivel que ha realizado el gobernador del estado, Mario Anguiano Moreno, en los cuatro años que lleva su administración, ha mejorado significativamente la capacidad de respuesta de su gobierno a la ciudadanía. Los mejores ejemplos están en las áreas de Seguridad Pública, Procuración de Justicia, Desarrollo Urbano, Desarrollo Rural y Secretaría General de Gobierno. La exitosa fórmula anguianista de cambiar para mejorar también debe aplicar, cuanto antes mejor, en la Secretaría de Salud.
SE DICE QUE…
*En el diferendo entre el CEN y el CDE en Colima del PAN, serán las instancias responsables de impartir justicia electoral quienes aclaren paradas. En tanto, prevalecen los hechos tal como se registraron el sábado 21 de septiembre anterior.
*Los mismos personajes de la picaresca política local que juraban y perjuraban que Mario Anguiano Moreno no iba a tener mano en el reparto agrario de chambas federales en Colima, y a toro pasado ahora alegan que sí lo tomó en cuenta Enrique Peña Nieto pero a cambio de marginarlo en la gran decisión del 2015, son quienes ya le pusieron cruz a cuadros valiosos identificados en el pasado con la ex lideresa vitalicia del SNTE Elba Esther Gordillo Lozano. Claro ejemplo de que hay vida política para ex elbistas es el Subsecretario de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Salud, Roberto Campa Ciprian. Él es sólo uno en la numerosa lista de funcionarios públicos de elección popular y designación, priistas, panistas y panalistas, todavía vigentes, proyectados durante más de dos décadas por la Maestra.