Actitudes que sólo te brindan infelicidad

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CN COLIMANOTICIAS

México.- Si hay muchas fórmulas y recetas para la felicidad y la vida en equilibrio sería lógico pensar que, por el contrario, también existen las “recetas” para tener una vida infeliz y llena de obstáculos.

La infelicidad no sólo se trata de momentos difíciles; es un estado de conciencia, del alma, donde la luz no se quiere ver por ningún lado. También, la infelicidad es una actitud, no tanto un desorden emocional; casi podría decirse que la infelicidad es un estilo de vida, sólo distinguible de la depresión porque no es algo clínico y por fortuna puede evitarse y tratarse con pura fuerza de voluntad.

Justo por esto mismo la infelicidad puede “sacudirse”, como si se tratara de ingeniería a la inversa. Las siguientes son cinco actitudes comunes que, juntas, constituyen la fórmula perfecta para llenarse de conflictos y pasársela mal. Evita adoptar cualquiera de estas posturas ante la vida:

1) Alejarse del contacto social. Las cosas comienzan por un enclaustramiento voluntario, un alejamiento de la convivencia social saludable. Las personas infelices comienzan por pasar demasiado tiempo a solas, se dedican a convivir con sus propios “demonios” (casi siempre ficticios) y rehúyen cualquier invitación a despabilarse. Al principio, empieza por ser un mecanismo de “defensa” frente al mundo exterior, pero con el paso del tiempo se vuelve un hábito muy difícil de remediar sin ayuda.

2) Maldecir de todo y por todo. El malhumor y los corajes son parte del día a día de la gente que no es feliz, y la manera obvia de no quedarse con todo eso adentro es sacarlo a manera de insultos y maldiciones hacia todos y por todo. Para este tipo de mentalidad no existen causas y consecuencias, sino culpables y responsables. Otra manera de abordar esta visión de la realidad, que no tiene que ver con el enojo pero es igual de tóxico en niveles altos, es el cinismo.

3) Patrones de pensamientos destructivos. Las personas infelices desarrollan casi inconscientemente patrones de pensamiento donde en el mundo todos son víctimas o villanos y lo bueno que sucede es consecuencia de que algo malo ocurre en otro lado. Es como si vivieran en una película de cine dramático, donde los actos son premeditados con alevosía para siempre dañar a otro y aprovecharse de él. Salir de estos pensamientos es complejo porque, para estas personas, representan la supuesta realidad y todo su mundo.

4) Ser pasivo y víctima ante las dificultades. Otra manera de reaccionar es pasivamente, como víctima y sin meter las manos o hacer el intento por salir bien librado de los obstáculos. Muchas veces, las personas infelices dejan de tomar la iniciativa de sus actos y sólo se dejan arrastrar por las circunstancias. E inevitablemente, como están cargadas de pesimismo y predisposición al desastre, es lógico que esas circunstancias terminan por ser siempre desfavorecedoras.

5) Aceptar la infelicidad como un destino. Por último y como parece que “no hay más remedio”, los infelices creen que no hay más qué hacer excepto “aceptar el destino que les tocó”, es decir, aceptan el sometimiento ante los obstáculos y las malas rachas como si ese fuera su papel en la vida, y por lo tanto, no hacen nada por evitarlo en lo más mínimo. Visto de otra manera, esta es una actitud de derrota anticipada hacia lo que sea que venga.

Fuente: HARMONÍA